Donosti sabe a pintxos
Puente del Pilar… grupo de glotones ansiosos por comer pintxos deciden pasar estos días en San Sebastián y sus alrededores en búsqueda de la mejor tapa. Para ninguno era la primera vez que hacíamos este viaje, con lo cual el objetivo se ceñía más a comer y beber más que a conocer enclaves turísticos…
Primera parada: Orio, pueblo acogedor a unos 20 km de San Sebastián, donde nos quedamos a dormir. He de destacar la amabilidad de Estibaliz y su Casa Mailan, donde nos hospedamos. Es una casa con mucho encanto, elegantemente amueblada, pintoresca, con un salón de desayuno con vajilla añeja, delicada, preciosa… y un pan por la mañana (casero) de los mejores que he comido en mi vida. Os lo recomiendo como una opción interesante y excelente relación calidad-precio.
Encontramos un restaurante en el mismo Orio, donde por un menú de 18€ en festivo y nos pusimos hasta arriba, algunos de los platos fueron estos, y cómo no, acompañados de una buena sidra lugareña:
A escasa distancia de esta localidad, nos esperaba la surfera y gastronómica Zarautz, donde probamos diferentes pintxos, fríos y calientes… maravillosa cena y espectacular fin del día tomando unos gintonics.
Por la mañana, y tras un suculento desayuno en la casa, nos fuimos hasta Astigarraga, a la famosa sidrería Petritegi, altamente recomendable: mesas alargadas como en un super banquete puebleril, barras de pan, sin partir, sidrería barra libre y un menú compuesto de: Choricitos a la sidra, Tortilla de Bacalao, Bacalao con pimientos, y un chuletón tierno y exquisito. De postre: Queso Idiazabal con membrillo y nueces. Salimos de allí más que contentos como podéis imaginar:
El último día lo dedicamos a visitar Hondarribia, famoso también por su concurso de pintxos, como pueblo tiene un encanto especial y una vida continua con su multitud de bares, destacamos: El gran Sol, con pintxos muy elaborados mmm aunque el resto tampoco se quedaba atrás. Mirad mirad:
Como véis, un fin de semana culinario bien amortizado!